Wednesday, April 18, 2007

Hace dos semanas recogí a una gatito de la calle. Era tan pequeño que tenía que alimentarlo con un biberón para gatitos. Aunque ha crecido un poco, sigue siendo pequeño y lo sigo alimentando de la misma forma. El problema con el gatito no radica en su talla ni en la forma en la que come, sino en la forma en la que descome... No voy a ser específica en cuanto a su malestar, la mayoría de las personas que conozco y que leen el blog desprecian a los gatos por razones estúpidas, y sé que de ninguna forma voy a tentarles el corazón, si de entrada por el simple hecho de mencionar un gato, ya tienen una mueca de asco en la cara. El caso es que yo estoy muy triste por que veo que un animalito está sufriendo y yo no puedo hacer nada. Yo he atendidio bien al gatito desde que lo encontré. Me he encariñado mucho con él y se me parte el corazón de ver que no mejora. Realmente estoy deprimida.
A lo mejor es pura enagenación mía, pero no dejo de pensar que soy un fracaso por no poder mantener bien al gatito. A ese fracaso se le suman más fracasos y yo no he dejado de sentirme mal desde ayer. Ya no quiero ir a la escuela, no quiero salir de mi casa, ni quiero encontrarme a nadie. Me hace mal estar expuesta a los problemas de las demás personas. No soporto ver a alguien deprimido o enfermo, no como antes. Ahora el morbo y el dolor ajeno me duelen. Es como leer un libro lleno de desgracias y terminar triste, muy triste y después no poder quitarse la idea de la cabeza.
Yo no quiero estar así, con éste ánimo que limita lo bueno y abre llagas en lo malo.

3 comments:

Octopus Queque said...

Tal vez por lo mismo de que el minino está muy pequeño (en cuanto a edad) tiene ciertos problemas de adaptación y crecimiento, por aquello de que no está creciendo en el ambiente normal de x gatito. Con calma, igual sería bueno que lo lleves a un veterinario. te diría algo más, pero pues mi mamá es alérgica y mi gato vive con unos amigos, así que no sé mucho =(

Y por lo demás, bueno, hoy en la tarde justamente leía algo de Gombrowicz. Decía que el dolor ajeno no es bueno en uno mismo, por lo mismo que tú dices de la enajenación. Lo mejor es separarse lo m+ás antes posible y, al final, concluir que no eres los demás. Y, en palabras de Gombrowicz, decir "Yo soy". O algo así, me agradó eso.

Saludeux!

Diana said...

Pequeña. Ya te pareces a Gabriel, proyectándote en un gatito. No linda, no es tu responsabilidad, si le pasa algo no es tu culpa. Besos.

grabiel said...

miau.